Zidane se movía con la armonía de un solo ser con el balón. Con una maestría y sofisticación técnica, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran milimétricos, como pinceladas magistrales en https://roxannjkwi332386.blogvivi.com/39197233/el-cabezazo-de-zidane-y-sus-repercusiones-mediáticas